viernes, 31 de julio de 2009

La princesa que quería ser rana


Esta es una historia de hadas, pero distinta a todas las demás. En esta historia había una ciudad grande, como todas las grandes, y mágica, como todas las mágicas, y en la ciudad un hermoso palacio en el que vivía una linda princesa.
Estaba rodeada de todos sus súbditos; un pequeño hombrecillo vestido de colores que saltaba continuamente a su alrededor intentando hacerla sonreír con un estúpido sombrero llenito de cascabeles que sonaban y sonaban al compás de sus torpes movimientos, dos damas de compañía, de culo gordo y mirada distraída, que hacían de sus días un auténtico aburrimiento...
Nuestra pequeña princesa suspiraba tras una de las ventanas de su hermoso palacio y soñaba que era una niña normal, jugando con otros niños, que podía comer con las manos y mancharse de barro, podía meter los pies en los charcos y llenarse la nariz con el almíbar de los caramelos.
Mientras suspiraba, el pequeño hombrecillo saltaba a su alrededor irritando más y más a nuestra princesa. Pero: ¿qué estaba pasando al otro lado de la gran ciudad?, otra niña soñaba con ser una princesa y tener vestidos de puntillas rosas y lazos en el pelo, llevar tirabuzones y tomar finos pasteles, dar clases de francés y ser admirada por toda la corte...y, entonces, algo extraño sucedió, no sólo sus pensamientos se cruzaron, saltando chispas de mil colores, si no que sus deseos se convirtieron en realidad.
De repente nuestra princesa se encontró en medio de la gran ciudad, rodeada de niños que tiraban piedras a las ventanas de un viejo almacén.
-"¡Qué divertido!”, pensó la princesa, y comenzó a lanzar piedras a las ventanas (tengo que decir, que para no haberlo hecho nunca, tenía muy buena puntería).
Saltó en los charcos, tomó dulces, se manchó de barro, corrió, cantó y fue feliz, pero al llegar la noche se sintió sola y perdida.
Todos los niños de la ciudad volvieron a sus casas y ella vagó por aquellas oscuras calles. No tenía miedo porque sabía que cuando el sol asomara por las montañas todo volvería a ser como el día anterior y jugaría, correría y no tendría que volver a soportar a sus odiosas damas de compañía, al estúpido hombrecillo y a los trajes llenos de puntillas y adornos que tanto la incomodaban.
Y decidió no volver a pensar en lo que un día le tocó ser, una princesita sin corona, porque a ella, lo que le gustaba realmente es ser una rana.
“Es mejor ser rana y bañarse en una charca que ser princesa y hacerlo en una bañera de plata”.
Para mi rana favorita, que un día llenó mi vida de sueños tan libres como el mar.

15 comentarios:

  1. me encanta tu rana feliz,espero que sigas contando cuentos besitos

    ResponderEliminar
  2. Las ranitas al menos tienen libertad para saltar, ir de un sitio a otro.... la princesita se sentía como un pajarito en una jaula de oro...bonito relato ;)

    ResponderEliminar
  3. Gracias, disfrute muchisimo leyendo estas historias maravillosas.Saludos

    ResponderEliminar
  4. Me ha encantado este cuento ojala a todos se nos cumplieran asi, todos nuestros sueños e ilusiones.
    bsos

    ResponderEliminar
  5. Me han encantado los cuentos y además tengo un sobrino de 2 años a quien contárselos.
    Muchas felicidades por escribir así de bonito y muchas gracias por dejarnos disfrutar de ellos.

    ResponderEliminar
  6. Besos y flores
    con que llenar nuestras horas
    magia y colores
    que giten que no estás sola

    ResponderEliminar
  7. Unos cuentos muy bonitos, me encanta leer asi que seguire visitandote para disfrutar con tus historias.

    ResponderEliminar
  8. Me ha encantado tu blog y sobretodo tus cuentos, qué imaginación tienes¡¡¡¡¡ y encima pacense... como yo¡¡¡

    ResponderEliminar
  9. hola,me encantan los cuentos,y me gustaria que me dejaras imprimirlos para mi sobrinita que tiene 8 meses,para cuando aprenda a leer,son unos cuentos preciosos.por cierto,el blog es precoso con esos pollitos.te dejo el mio por si te quieres pasar.
    http://begottendollsbybianca.blogspot.com/

    ResponderEliminar
  10. Me encantan todos tu cuentos , muchas felicidades y no dejes de escribir nunca.

    Besos



    http://petitissim.blogspot.com/

    ResponderEliminar
  11. precioso cuento y aun mas con una bella moraleja. Si me lo permites en cuanto regrese a clases con mis alumnos se los dire, se presta para continuar y cambiar el final.
    te felicito es bastante didactico y bello en su redaccion
    leonor
    desde mexico

    ResponderEliminar
  12. Andrea, Nati pequeña escritora de sueños ,quiero Felicitarte por tus cuentos, por tu blog me parece muy simpatico con esos pajaros patilargos y por las ilustraciones el conjunto lo hace tan especial¿Ah! leidos ganan mucho,tienes una voz muy dulce Gracias por compartir con todos tu tiempo.

    ResponderEliminar
  13. Soy Pedro y tengo 12 años mi hermana me ha dejado ver este blog y me ha guatado un montón, ahora cuando necesito un cuento para dormir,no tengo que pedirlo elijo uno y tan contento.
    Felicidades por tus cuentos.

    ResponderEliminar
  14. Que magia destila tu pluma...o teclado ¿también haces los dibujos????? Son preciosos!!! Un saludo lleno de cariño
    Begoña

    ResponderEliminar
  15. hola me paresion muy belloy simpatico el cuento

    ResponderEliminar